martes, 19 de febrero de 2013
Aquí lo teneis...
No pudo ser...
Lo del día del domingo en Sevilla, fue un poco de locos.
En cuanto amaneció el día todos en general y los cofrades en particular, tirábamos de móviles, internet, etc.. y jugábamos a ser los nuevos Montes de Oca, repartiendo a diestro y siniestro nuestras impresiones sobre la borrasca y lluvias de ese día; que si el porcentaje no es alto, que si las lluvias serán débiles, que si la borrasca se está retrasando, que si son nubes altas, etc. Y ya para colmo entraban los eruditos del tema, diciendo cosas como, "con esta calor no va a llover hombre", " si cae, va a ser una cagailla", " yo creo que por la gente que ha venido a Sevilla hoy debieran los pasos de salir a la calle", " la desición ya está tomada pero no se ha dicho nada para no fastidiar a la hostelería"... y demás chorradas.
Tras esto llego el momento de máxima tensión. Era las 11 de la mañana poco más o menos. Atentos todos a las redes sociales haber quien era el primero que colocaba algo relacionado con la decisión a tomar. Los hermanos mayores estaban ya cada cual en su hermandad y tenían que reunirse con su junta de gobierno para ver cual sería su decisión, y alguien del consejo se encargaría de recoger las informaciones una a una de las hermandades. La premisa era clara; "si una decía que no, no habría ningún paso en la calle".
Poco antes de las 11:30 de la mañana supimos que las salidas de los pasos para presidir las estaciones del Via Crucis se habían suspendido. Al parecer no hubo unanimidad, algunas dijeron que sí y otras que no, por lo tanto quedaba suspendida cualquier salida.
A partir de aquí y cuando todos creíamos que ya todo había terminado, empezó un carrusel de noticias relacionadas con todo esto y que desde mi punto de vista no le hace ningún bien ni a Sevilla, ni a nuestro maravilloso mundo cofrade.
Primero que si Montensión tiene previsto sacar a su paso a la Plaza de los Carros, después que si Las Siete Palabras quiere ir al Museo a rezar su estación del Via Crucis, y ya por último la traca final, Torreblanca pide permiso para presidir en la Catedral el Via Crucis de la Fe. Pero parece ser que dios lanzo desde el cielo un poco de cordura y la mayoría de estas intenciones se quedaron en sólo eso, intenciones, y que después no se llevaron a cabo.
Así que, cuando parecía que volvía la calma y que la cordura había imperado en todo esto, llegó el bombazo definitivo. Las redes sociales hechaban humo, y para la sorpresa de muchos, alegrías de algunos y la indignación de la mayoría, empezó cada vez más fuerte a correr la noticia de que Torreblanca iría desde Santa Marina hasta San Luis para rezar allí su estación del Via Crucis. A partir de aquí los rumores se diversificaron, " va a salir a darse una vuelta por el barrio", " va a llegar hasta la Macarena para devolver el saludo del Sentencia en su Via Crucis particular", e incluso ya los más osados decían " que va a salir incluso con Virgen de los Reyes detrás"... De nuevo el rumor se disipaba cuando aparecieron las primeras imágenes del Cautivo de Torreblanca saliendo de Santa Marina.
Esto para mí es completamente incomprensible. En fin sucedió todo como sucedió, y ya no tiene vuelta atrás. Según las personas que estaban allí presentes salió de Santa Marina para volver a entrar de nuevo en el templo.
Este fue, de forma resumida, un poco el fin de esta locura de la que se había rodeado este Via Crucis de la Fe desde sus orígenes.
Y a todo esto el Via Crucis dentro de la catedral se celebro solo con las cruces de guía. Ahora eso sí, con el marco de la catedral como telón de fondo imaginaros como fue....
En cuanto amaneció el día todos en general y los cofrades en particular, tirábamos de móviles, internet, etc.. y jugábamos a ser los nuevos Montes de Oca, repartiendo a diestro y siniestro nuestras impresiones sobre la borrasca y lluvias de ese día; que si el porcentaje no es alto, que si las lluvias serán débiles, que si la borrasca se está retrasando, que si son nubes altas, etc. Y ya para colmo entraban los eruditos del tema, diciendo cosas como, "con esta calor no va a llover hombre", " si cae, va a ser una cagailla", " yo creo que por la gente que ha venido a Sevilla hoy debieran los pasos de salir a la calle", " la desición ya está tomada pero no se ha dicho nada para no fastidiar a la hostelería"... y demás chorradas.
Tras esto llego el momento de máxima tensión. Era las 11 de la mañana poco más o menos. Atentos todos a las redes sociales haber quien era el primero que colocaba algo relacionado con la decisión a tomar. Los hermanos mayores estaban ya cada cual en su hermandad y tenían que reunirse con su junta de gobierno para ver cual sería su decisión, y alguien del consejo se encargaría de recoger las informaciones una a una de las hermandades. La premisa era clara; "si una decía que no, no habría ningún paso en la calle".
Poco antes de las 11:30 de la mañana supimos que las salidas de los pasos para presidir las estaciones del Via Crucis se habían suspendido. Al parecer no hubo unanimidad, algunas dijeron que sí y otras que no, por lo tanto quedaba suspendida cualquier salida.
A partir de aquí y cuando todos creíamos que ya todo había terminado, empezó un carrusel de noticias relacionadas con todo esto y que desde mi punto de vista no le hace ningún bien ni a Sevilla, ni a nuestro maravilloso mundo cofrade.
Primero que si Montensión tiene previsto sacar a su paso a la Plaza de los Carros, después que si Las Siete Palabras quiere ir al Museo a rezar su estación del Via Crucis, y ya por último la traca final, Torreblanca pide permiso para presidir en la Catedral el Via Crucis de la Fe. Pero parece ser que dios lanzo desde el cielo un poco de cordura y la mayoría de estas intenciones se quedaron en sólo eso, intenciones, y que después no se llevaron a cabo.
Así que, cuando parecía que volvía la calma y que la cordura había imperado en todo esto, llegó el bombazo definitivo. Las redes sociales hechaban humo, y para la sorpresa de muchos, alegrías de algunos y la indignación de la mayoría, empezó cada vez más fuerte a correr la noticia de que Torreblanca iría desde Santa Marina hasta San Luis para rezar allí su estación del Via Crucis. A partir de aquí los rumores se diversificaron, " va a salir a darse una vuelta por el barrio", " va a llegar hasta la Macarena para devolver el saludo del Sentencia en su Via Crucis particular", e incluso ya los más osados decían " que va a salir incluso con Virgen de los Reyes detrás"... De nuevo el rumor se disipaba cuando aparecieron las primeras imágenes del Cautivo de Torreblanca saliendo de Santa Marina.
Esto para mí es completamente incomprensible. En fin sucedió todo como sucedió, y ya no tiene vuelta atrás. Según las personas que estaban allí presentes salió de Santa Marina para volver a entrar de nuevo en el templo.
Este fue, de forma resumida, un poco el fin de esta locura de la que se había rodeado este Via Crucis de la Fe desde sus orígenes.
Y a todo esto el Via Crucis dentro de la catedral se celebro solo con las cruces de guía. Ahora eso sí, con el marco de la catedral como telón de fondo imaginaros como fue....
lunes, 18 de febrero de 2013
viernes, 15 de febrero de 2013
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